MB&F Legacy Machine X
MB&F LMX en titanio
Los chicos rebeldes de la relojería nos sorprenden con el LMX por el décimo aniversario de este modelo.
Un LMX es el octavo calibre que presentan en 10 años y con mucho más diseño 3D
Es un Legacy Machine con esteroides
Caja: 44 milímetros disponible en dos versiones, oro rojo y titanio
Calibre: cuerda manual desarrollado con Eric Giroud que late a 18.000 alternancias/hora y con 7 días de reserva de marcha
Precio: dos ediciones limitadas a 18 y 33 piezas con unos precios de 105.000 y 92.000 euros más IVA.
Max Büsser y su familia de amigos nos vuelven a sorprender con una revisión, por el décimo aniversario, de una de sus grandes y más aplaudidas creaciones, el Legacy Machine.
Cuando hablamos de innovación en la relojería y que las marcas deben hacernos soñar para enganchar a las nuevas generaciones, nos referimos a creaciones de este tipo. MB&F se atreven con cada nuevo modelo a desafiar las reglas y complicaciones de la relojería tradicional, no se quedan anclados en el “Savoire Faire” de las marcas tradicionales y un ejemplo son los Legacy Machines.
La marca nace en 2005 tras la salida de Büsser de Harry Winston, donde era el responsable de la división de relojería a cargo de las famosas OPVS. El primer Legacy Machine nace de la mente de Max Bússer en 2011 como un homenaje a los grandes relojeros de los siglos XVIII y XIX. MB&F se planteó en ese momento ¿qué habría creado la marca hace un siglo, en la época dorada de la relojería? Díez años más tardes somos conscientes de hasta donde han sido capaces de llegar.
En esta década, 8 calibres completamente innovadores y sorprendentes han surgido de sus “talleres”, en colaboración con grandes genios de la relojería como Kari Voutilainen, Eric Coudray, Stephen MacDonnell, entre otros. Nos han sorprendido con complicaciones como el primer volante separado del resto del calibre y situado por encima de la esfera lo que complicaba en gran manera la estabilidad del calibre pero se consiguió, dos husos horarios completamente independientes, la primera indicación de reserva de marcha vertical, el primer indicador de reserva de marcha que puede rotar para mostrar el día de la semana, un calendario perpetuo deportivo hermético hasta 80 metros, el doble escape, el primer y más grandes escape triaxial del mercado o un tourbillon volante.
El Legacy Machine 1 se diseñó con una caja redonda que era la primera que presentaba MB&F y lo que más sorprendió era su esfera en la que destacaba colgado sobre ella el volante suspendido que abandonaba su habitual ubicación en la parte trasera del calibre.
El hipnótico volante suspendido se ha convertido en la imagen característica y el leitmotiv conceptual y mecánico que se repite en toda la colección Legacy Machine.
El movimiento Legacy Machine 1 surgió como fruto de la colaboración, en este caso, con dos amigos de excepción, dos estrellas de la relojería que comparten poco más que un talento admirable, Jean-François Mojon, reconocido por su innovadora ingeniería y Kari Voutilainen, una leyenda viva de la relojería clásica.
MB&F Legacy Machine 1
Cuando el LM1 sorprendió al mundo de la relojería y nos enamoró hace 10 años, los expertos del sector pronosticaron que MB&F orientaría su producción y ventas hacia una estética más próxima a los Legacy Machines. No sucedió así, las poco convencionales y quizá más características creaciones de Büsser, como los Horological Machines, siguen constituyendo una parte fundamental de su producción. Diez años más tarde, los coleccionistas de relojes también han empezado a mostrar interés por el planteamiento más clásico de las Legacy Machines. MB&F sigue avanzando en ambas direcciones en apariencia opuestas, la tradición relojera con cajas redondas y calibres sorprendentes y los relojes disruptivos que no se parecen a nada de lo visto hasta el momento y siempre con un firme espíritu de independencia y creatividad.
El LMX, como el Legacy Machine 1 que se puede considerar como su ancestro, consta de dos esferas de laca blanca con indicación independiente de las horas. A diferencia del primer modelo, ambas esferas están inclinadas en ángulo, una característica sumamente compleja presente en los Legacy Machines más recientes, que precisa la transferencia de la energía desde el plano horizontal al vertical por medio de engranajes cónicos.
MB&F LMX oro rojo
Las agujas de la esfera derecha se ajustan por medio de la corona situada a las 2 horas en la que está grabada la emblemática hacha de guerra de MB&F y que también sirve para dar cuerda al movimiento. La corona situada a las 10 horas, grabada con un globo terráqueo que ilustra la posibilidad de usar un segundo huso horario, sirve para ajustar la hora de la esfera izquierda.
En la esfera del LMX se puede contemplar elementos funcionales como el puente de escape en forma de hacha de guerra, el volante y los componentes del tren de engranajes y llaman especialmente la atención tres grandes ruedas. Situada a las 6 horas, se encuentra la habitual rueda del segundero, además de las otras dos ruedas, ubicadas junto a sus correspondientes coronas de armado que entran en movimiento cuando se ajusta la hora de su respectiva esfera.
Cabe destacar el nuevo volante creado a medida de 13,4 milímetros dotado de cabezas perdidas y ofrece al relojero una mayor precisión a la hora de regular el corazón del reloj. Entre las mejoras incorporadas destacan igualmente los brazos pulidos de los puentes rectos que se muestran en la esfera, acabados a mano para obtener superficies superiores con un perfil curvo.
Una de las innovaciones más sorprendentes de este LMX es el indicador de reserva de marca hemisférico de 7 días que gira y que hace un guiño al primer indicador de reserva de marcha vertical del mundo que se presentó en el Legacy Machine 1. Esta sofisticada indicación ofrece la posibilidad de seleccionar dos modos distintos de cuenta atrás para visualizar la reserva de marcha, una enmarcada por una escala arqueada numerada del 1 al 7 y la otra compuesta por los días de la semana, de lunes a domingo.
La indicación de reserva de marcha se puede rotar por completo. Así, el portador del reloj puede elegir el modo de indicación de reserva de marcha que prefiera: al continuar girando la corona grabada con el hacha de guerra una vez que la reserva de marcha esté de nuevo al nivel máximo, se puede cambiar la orientación de la indicación para facilitar la visualización de la escala numérica o de la de los días de la semana.
En cuanto al calibre del LMX es un mecanismo de cuerda manual desarrollado en colaboración con Eric Giroud y en exclusiva para MB&F que late a 18.000 alternancias/hora y que, como hemos comentado, ofrece siete días de reserva de marcha gracias a tres barriletes.
La caja es de 44 milímetros por 21,4 de alto y está disponible en dos versiones, una en oro rojo y otra en titanio. La versión de oro rojo presenta las platinas y los puentes con tratamiento NAC en gris antracita, mientras que la de titanio las llevas en verde. Dispone de cristal de zafiro muy abovedado en el anverso y fondo de cristal de zafiro, ambos con tratamiento antirreflejos.
La correa es de aligátor negra cosida a mano con cierre desplegable de oro rojo o de aligátor gris cosida a mano con cierre desplegable de titanio.
Son dos ediciones limitadas a 18 piezas en oro rojo y 33 en titanio con unos precios de 105.000 y 92.000 euros más IVA.
Fotos: MB&F