Hotel Kempinski Emirates Palace, Abu Dhabi
El Emirates Palace es un hotel cinco estrellas lujo, situado en la costa de Abu Dhabi, capital de los Emiratos Árabes Unidos, donde se puede vivir el encanto y el lujo de las Mil y Una Noches. Todo en este hotel es a lo grande y se puede experimentar desde el primer momento cuando ves el enorme arco de 40 metros de alto y 36 de ancho de la entrada.
Se construye en el máximo momento de crecimiento de la construcción en Emiratos y como competencia al Burj Al Arab, edificado en el vecino emirato de Dubai, que hasta ese momento era considerado el hotel más lujoso del mundo.
Se inauguró en febrero de 2005 y fue construido a iniciativa del Gobierno de Abu Dabi, que es también su propietario, aunque está dirigido por el grupo alemán de hoteles Kempinski. En su construcción se tardaron más de tres años.
Dispone de una gran cúpula central de 42 metros de ancha que está acompañada por 114 más a lo largo de todo el edificio. Los materiales de construcción del exterior del edificio reflejan los diferentes colores que presenta la arena del desierto arábigo.
Gran Cúpula Central del edificio principal de Hotel Kempinski Emirates Palace
Los costes para la construcción del hotel ascendieron a más de 2.000 millones de euros. Tiene más de 2.000 empleados de 50 diferentes nacionalidades. La atención al cliente es lo primordial.
El Emirates Palace es el segundo hotel más caro jamás construido, solo superado por el Marina Bay Sands en Singapur.
En 2015 este Resort de lujo gano 9 premios de los World Traveller Awards, entre ellos el mejor resort, mejor hotel del medio oriente y de Emiratos. Con posterioridad ha ganado multitud de premios. En 2018 recibió los World ´s Best Conference Hotel y World´s Leading Luxury Beach Resort en los World Travel Awards.
El Emirates Palace tiene una superficie total de más de 1 millón de metros cuadrados, de los que una gran parte son jardines. Tiene una capacidad de aparcamiento subterráneo para 2.500 vehículos.
El hotel está dividido en un edificio central y dos alas a cada lado de este. Desde una punta a la otra hay más de kilómetro de distancia.
El hotel cuenta con 302 habitaciones de lujo, denominadas Coral, Pearl y Diamond con unos 55 metros cuadrados y 92 suites que van desde la Suite Khaleej de 110 metros cuadrados a la Suite Palace de tres habitaciones con salón y comedor con 680. Además, en los pisos sexto y séptimo se encuentran las Suites del Palacio. 22 suites con 3 dormitorios están reservadas para la realeza y personalidades. La tarifa mínima es de algo más de 300 euros la noche para las habitaciones tipo Coral; y la más alta que supera los 14.000 euros por noche por la Palace Grand Suite todo ello en función de la temporada. Todas las habitaciones disponen de televisiones de plasma de 125 cm y las suites de 150.
Posee 14 restaurantes, cafés y bares entre los que me gustaría destacar Hakkasan, la famosa cadena internacional de restaurantes chinos. Lo mejor de lo mejor. La terraza del Cascades, el Libanes Mawal, la cocina emiratí de Mezlai, Sayad especializado en marisco, el italiano Mezzaluna o Le Vendome de cocina internacional. Se deben de probar todos pero si hay que destacar, ese es Hakkasan. Como plato curioso en uno de sus restaurantes puedes degustar hamburguesa de camello con mayonesa de trufas y un toque de polvo de oro.
Dispone de un spa de 1.500 metros cuadrados que te transportara a un mundo de relajación y ensueño con más de 20 tratamientos. En 2015 ganó el premio de World Traveller Awards al mejor spa y a los mejores tratamientos del mundo.
Además, dispone de dos gimnasios uno a cada ala del edificio de más de 300 metros cada uno con las máquinas de última generación de Technogym.
Ofrece 2 piscinas también una a cada ala del edificio. Una es para adultos sin niños y la otra para familias que incluye un mini parque acuático, además de una playa privada de 1,3 kilómetros y una pista para helicópteros. El “Beach Club” dispone de una pista de más de 6 kilómetros para correr o montar en bicicleta, además de deportes de agua, pistas de tenis, de cricket, rugby, futbol e incluso padel.
Tiene 17 tiendas de máximo lujo y hasta una máquina dispensadora de lingotes de oro.
Dispone de una sala para celebrar bodas con capacidad para 2.400 personas, un auditorio para 1.100 y las más grandes orquestas, en donde se han celebrado importantes eventos deportivos y cinematográficos y 42 salas de reuniones.
Auditorio
En cuanto al mejor momento para visitar este exclusivo y exuberante hotel es desde noviembre a febrero, lo que se considera el invierno, ya que las temperaturas no son tan elevadas y van desde los 16 grados por la noche a los 32 por el día. El resto del año las temperaturas son tan elevadas que no lo recomendamos para un viaje de placer.
Fotos: Emirates Palace